Dificil
es el desapego, difícil es el camino de la vida sin sosten familiar,
pero por algo venimos a este mundo, y es aprender, aprender a dar sin
esperar retribuciíón, aprender a ofrecer nuestra ayuda a quien lo
necesita, aprender que lo material, tanto el cuerpo como el dinero nos
atan a este plano terrenal, aprender a que somos más espíritu que
materia, que las cosas, todos nuestros asuntos son
de Dios y de todos los seres de luz que nos guían y asisten y que
nuestro deber es aprobar las materias de la escuela de la vida, por eso
mi familia es la humanidad entera, mi anhelo más grande reencontrarme
con el altísimo y mi tarea es no reconocer que no tendré muchos talentos
especiales, pero soy perseverante y sé que nada me faltará, porque Dios
está en mí y conmigo. Bendice a todos, incluso a tus enemigos. Agradace
siempre, porque nada se hace por obigación, sino de corazón. Gracias
Dios por darme esta oportunidad de aprender y de superarme enesta
encarnación.